Durante décadas, los inversores se han enfrentado al desafío de obtener rentabilidad en distintos contextos del mercado: alcistas, bajistas o laterales. Para quienes buscan proteger su cartera de la volatilidad o capturar oportunidades tanto en subidas como en caídas, una estrategia destaca por su flexibilidad y enfoque táctico: la estrategia long/short con acciones.
Este enfoque, adoptado tradicionalmente por hedge funds y cada vez más por inversores individuales sofisticados, combina posiciones largas (long) en acciones que se espera que suban con posiciones cortas (short) en acciones que podrían bajar. El objetivo no es simplemente ganar cuando todo el mercado sube, sino generar rendimiento relativo obtener beneficios por la diferencia entre el comportamiento de ambas posiciones incluso en escenarios de incertidumbre o retrocesos generales.
A diferencia de otras estrategias más direccionales, el long/short permite construir una cartera más equilibrada, con exposición neta ajustada y control de riesgos. No se trata solo de comprar barato y vender caro, sino de identificar pares de activos, detectar ineficiencias, gestionar la exposición total y buscar consistencia en los retornos a lo largo del tiempo. Es una táctica utilizada tanto para cobertura como para generación activa de alpha.
En esta guía te explicamos qué es exactamente la estrategia long/short, cómo funciona paso a paso, cuándo conviene aplicarla, qué ventajas y desventajas ofrece, y qué errores debes evitar si quieres utilizarla correctamente. Además, verás ejemplos prácticos para entender mejor cómo usarla en contextos reales, qué tipo de acciones suelen combinarse, y cómo adaptar esta metodología a tu perfil de riesgo y objetivos de inversión.
Si estás buscando una forma avanzada de diversificar tu cartera, reducir volatilidad o aprovechar oportunidades relativas en el mercado de acciones, la estrategia long/short puede ser una herramienta poderosa. Entender sus fundamentos y aplicarla con criterio puede marcar una gran diferencia en tu rendimiento a largo plazo.
¿Qué es la estrategia long/short?
La estrategia long/short combina posiciones largas (long) comprar acciones esperando que suban de valor con posiciones cortas (short) vender acciones que no posees, apostando a que bajarán. El objetivo es obtener beneficios tanto si el mercado sube como si baja, siempre que la acción “larga” tenga mejor rendimiento que la “corta”.
No es una estrategia direccional tradicional. El inversor busca más bien aprovechar diferencias relativas de rendimiento entre dos activos o grupos de activos. Por ejemplo: si crees que la acción A subirá más que la acción B (o que bajará menos), puedes ir largo en A y corto en B.
Cómo funciona paso a paso
Veamos cómo se implementa una estrategia long/short con acciones:
Identificación de oportunidades: se analizan empresas del mismo sector o industria que podrían comportarse de forma distinta ante el mismo contexto.
Selección de los activos:
- Posición larga (long): acción con buenos fundamentales, potencial alcista o infravalorada.
- Posición corta (short): acción con problemas financieros, sobrevalorada o con proyección bajista.
- Asignación de capital: se define cuánto se invertirá en cada posición. Algunas estrategias equilibran ambas al 50%, otras ajustan el peso según convicción o riesgo.
Ejecución: se abre una posición larga y simultáneamente una posición corta. Por ejemplo:
Comprar $5,000 de acciones de Microsoft.
Vender en corto $5,000 de acciones de IBM.
Ejemplo práctico
Supongamos que estás analizando dos compañías del sector tecnológico: Empresa X y Empresa Y.
- Empresa X tiene un sólido crecimiento de ingresos, baja deuda y cotiza con descuento frente al sector.
- Empresa Y ha reportado caídas en ventas, alto apalancamiento y su acción ha subido más de lo justificable.
Tú crees que Empresa X superará a Empresa Y en rendimiento en los próximos meses.
Entonces:
- Vas largo en Empresa X, comprando $10,000 en acciones.
- Vas corto en Empresa Y, vendiendo $10,000 en acciones que no posees (usando tu broker para tomar prestadas).
Si Empresa X sube 15% y Empresa Y baja 10%, tu ganancia combinada sería de aproximadamente $2,500, independientemente de cómo se haya comportado el mercado general.
Cuándo aplicar una estrategia long/short
Esta estrategia no es adecuada para todos los momentos del mercado, pero puede ser útil en los siguientes escenarios:
- Alta volatilidad: cuando el mercado es inestable, neutralizar exposición con posiciones opuestas puede reducir riesgo.
- Incertidumbre macroeconómica: si no está claro si el mercado irá hacia arriba o hacia abajo, una estrategia relativa entre activos puede ser más efectiva.
- Análisis sectorial profundo: si detectas distorsiones o ineficiencias entre empresas similares.
- Cobertura (hedging): para proteger ganancias existentes o reducir exposición neta al mercado.
Beneficios de la estrategia long/short
- Reducción del riesgo de mercado: al tener posiciones largas y cortas, reduces la dependencia del comportamiento general del mercado.
- Diversificación: permite generar retornos por diferencias relativas, más allá del contexto económico.
- Aprovecha ineficiencias: ideal para inversores con buen análisis fundamental, técnico o cuantitativo.
- Flexibilidad: se puede aplicar en distintos sectores, tamaños de empresa o incluso entre regiones.
Desventajas y riesgos
- Complejidad operativa: implica análisis doble y gestión activa.
- Costos de financiamiento: las posiciones cortas generan comisiones por préstamo de acciones.
- Riesgo ilimitado en short: si la acción sube en vez de bajar, las pérdidas pueden ser considerables.
- Gestión emocional más exigente: mantener dos posiciones opuestas puede generar más estrés.
Consejos para aplicar una estrategia long/short
- Elige empresas del mismo sector o correlación alta: esto mejora la comparación relativa y reduce factores externos.
- Controla el tamaño de las posiciones: equilibrar el capital te ayuda a controlar el riesgo neto.
- Evita shorts en acciones con alta volatilidad o bajo volumen: podrías tener problemas de liquidez o enfrentar subidas explosivas.
- Usa stop-loss y take-profit claros: para no dejarte llevar por emociones o sorpresas.
¿Quién debería usarla?
Esta estrategia está más orientada a inversores intermedios o avanzados que:
- Tienen conocimientos sólidos de análisis fundamental o técnico.
- Pueden seguir de cerca las posiciones.
- Están familiarizados con operaciones en corto.
- Buscan generar alfa (exceso de retorno) en mercados complejos.
Para principiantes, puede ser útil estudiar primero estrategias más sencillas como el buy & hold o la rotación sectorial.
Estrategias derivadas
Existen variantes más sofisticadas del enfoque long/short:
- Market Neutral: busca igualar la exposición long y short para que el rendimiento dependa solo de la diferencia entre ambas.
- Pairs Trading: se eligen dos acciones históricamente correlacionadas. Si se “desalinean”, se compra la débil y se vende la fuerte, esperando que retomen su relación normal.
- Long/Short sectorial: por ejemplo, largo en energías renovables, corto en petroleras.
Estas estrategias requieren mayor experiencia y herramientas de análisis, pero también pueden ofrecer oportunidades más precisas.
Conclusión
La estrategia long/short con acciones no es magia ni garantía de éxito. Pero bien aplicada, puede convertirse en una herramienta poderosa para gestionar riesgos, aprovechar oportunidades de valor relativo y navegar con más estabilidad en mercados turbulentos. Su verdadera fortaleza radica en la capacidad de generar rentabilidad ajustada al riesgo, sin depender únicamente de la dirección general del mercado.
Combina lo mejor de dos mundos: el potencial de crecimiento de las posiciones largas y la protección (o especulación informada) que brindan las posiciones cortas. Esta dualidad permite construir carteras más resilientes y adaptables, capaces de enfrentar tanto ciclos expansivos como periodos de corrección o incertidumbre. No obstante, exige mucho más que intuición o suerte: requiere análisis disciplinado, gestión activa, control emocional y una lectura precisa de las dinámicas del mercado.
Además, su versatilidad permite personalizarla según el perfil de cada inversor. Puede utilizarse para cobertura parcial de una cartera, para tomar posiciones en pares específicos de acciones (pair trading), o como parte de una estrategia más amplia de generación de alpha. Pero como toda estrategia compleja, su uso sin conocimiento puede generar resultados contraproducentes.
Por eso, si estás listo para ir más allá del enfoque tradicional y cuentas con las herramientas adecuadas —información, análisis fundamental y técnico, control de riesgo y seguimiento constante—, el long/short puede marcar una diferencia significativa en tu portafolio. Es una estrategia exigente, pero también una de las más completas y versátiles para el inversor moderno que quiere operar con criterio, flexibilidad y visión estratégica.
Preguntas frecuentes
¿Qué es la estrategia long/short con acciones?
Es una estrategia que consiste en tomar simultáneamente una posición larga (comprar) en una acción que se espera que suba y una posición corta (vender) en otra que se espera que baje. El objetivo es obtener beneficios por la diferencia de rendimiento entre ambas.
¿Qué ventajas ofrece esta estrategia?
Permite reducir el riesgo de mercado, aprovechar oportunidades relativas entre acciones y generar retornos en mercados volátiles o laterales.
¿Qué riesgos implica operar long/short?
Entre los riesgos destacan la posibilidad de pérdidas por una mala selección de activos, la volatilidad inesperada, los costos de financiación y la exposición a movimientos extremos en acciones individuales.
¿Es una estrategia adecuada para principiantes?
No se recomienda para principiantes, ya que requiere conocimientos avanzados de análisis técnico y fundamental, así como experiencia en gestión de riesgos y operativa con venta en corto.
¿Puedo aplicar esta estrategia en cualquier broker?
No todos los brokers permiten abrir posiciones en corto o acceder a cuentas con margen. Es importante verificar que el broker tenga estas funciones habilitadas y condiciones claras de ejecución.