Cómo la inteligencia artificial calcula el riesgo crediticio: precisión, ventajas y dilemas éticos

Calcular el riesgo crediticio ha sido siempre un desafío central para bancos, fintechs y entidades prestamistas. Determinar si una persona podrá o no cumplir con sus obligaciones financieras implica analizar su comportamiento, su historial, su estabilidad y, cada vez más, datos que antes no se consideraban relevantes. Con el auge de la inteligencia artificial (IA), esta evaluación se ha vuelto mucho más compleja… y precisa.

La IA no solo analiza los datos tradicionales (como ingresos y deudas), sino que es capaz de procesar información no estructurada, detectar patrones ocultos y predecir comportamientos futuros con base en modelos de aprendizaje automático. Esto ha transformado por completo la forma en que se mide el riesgo financiero, permitiendo decisiones más ágiles y personalizadas.

Sin embargo, este avance también trae consigo nuevos riesgos. ¿Qué tan transparente es el proceso? ¿Cómo sabemos si los algoritmos no están discriminando o sesgando decisiones? ¿Quién supervisa estos modelos y cómo se corrigen errores si alguien es etiquetado como “alto riesgo” injustamente?

En esta guía exploramos en profundidad cómo se aplica la IA al cálculo del riesgo crediticio: cómo funcionan los modelos, qué datos se utilizan, cuáles son los beneficios frente a los sistemas tradicionales, y qué desafíos éticos, regulatorios y sociales deben ser abordados para evitar consecuencias no deseadas.

¿Qué es el riesgo crediticio y por qué se calcula?

El riesgo crediticio es la probabilidad de que una persona (o empresa) no cumpla con sus obligaciones financieras en los plazos pactados. Evaluar ese riesgo permite a las entidades decidir si otorgan un crédito, en qué condiciones (tasa, plazo, monto) o si lo rechazan directamente.

Tradicionalmente, este análisis se hacía con criterios relativamente rígidos:

  • Historial de pagos (buró de crédito)
  • Nivel de ingresos y deudas actuales
  • Estabilidad laboral
  • Garantías o avales

El problema con estos modelos es que excluyen a millones de personas sin historial financiero formal, como trabajadores informales, emprendedores o personas jóvenes. Ahí es donde entra en juego la IA, capaz de construir un perfil de riesgo con base en información alternativa y técnicas avanzadas de análisis predictivo.

¿Cómo calcula la IA el riesgo crediticio?

La IA utiliza algoritmos de machine learning entrenados con grandes volúmenes de datos históricos para identificar patrones que predicen el comportamiento financiero futuro. El proceso suele incluir varias etapas:

  • Recolección de datos: se recopila información de múltiples fuentes: bancarias, fiscales, móviles, consumo, redes sociales (en algunos casos), etc.
  • Preprocesamiento: los datos se limpian, normalizan y transforman para ser legibles por los modelos.
  • Entrenamiento del modelo: se alimentan algoritmos con casos previos (quién pagó y quién no pagó) para que aprendan a predecir el riesgo.
  • Evaluación de variables: el modelo asigna diferentes pesos a cada dato según su poder predictivo (por ejemplo, atrasos recientes pueden tener más peso que ingresos).
  • Asignación de score: se calcula un puntaje o clasificación de riesgo personalizado.
  • Actualización constante: el sistema aprende con nuevos datos y mejora su precisión con el tiempo.

Algunos modelos incluso utilizan IA explicable (XAI) para justificar sus decisiones y mostrar qué factores influyeron más en la calificación final.

Ventajas de usar IA para calcular el riesgo crediticio

Comparada con los métodos tradicionales, la IA ofrece una serie de beneficios que han impulsado su adopción masiva en el sector financiero:

  • Mayor precisión: al considerar cientos o miles de variables, los modelos son más exactos en sus predicciones.
  • Velocidad: las decisiones pueden tomarse en segundos, sin intervención humana.
  • Inclusión financiera: permite evaluar a personas sin historial crediticio formal, utilizando fuentes de datos alternativas.
  • Evaluación continua: el perfil de riesgo puede actualizarse en tiempo real, en lugar de revisarse una vez al año.
  • Prevención de fraude: detecta comportamientos sospechosos y ayuda a reducir pérdidas por impago o estafas.

Estos beneficios explican por qué bancos, fintechs, cooperativas y hasta plataformas de crédito entre personas (P2P) están adoptando IA como parte central de sus procesos de evaluación.

¿Qué tipo de datos utiliza la IA para evaluar el riesgo?

Una de las grandes diferencias entre los modelos tradicionales y los basados en IA es la amplitud de datos considerados. Algunos ejemplos incluyen:

Tipo de dato Ejemplos
Financieros clásicos Historial de pagos, ingresos, deudas, tarjetas de crédito
Bancarios y transaccionales Frecuencia de gastos, tipos de consumo, saldos promedio
Datos alternativos Pagos de servicios, recargas móviles, uso de billeteras
Datos de dispositivos Geolocalización, modelo de teléfono, patrones de navegación
Redes sociales y comportamiento online Interacciones, horarios de conexión, estabilidad digital (solo en países con autorización)

El uso de datos alternativos ha permitido incluir a poblaciones tradicionalmente excluidas del sistema financiero formal, especialmente en regiones como América Latina, África y el sudeste asiático.

Riesgos y desafíos éticos

A pesar de sus ventajas, el uso de IA para evaluar riesgo crediticio no está exento de críticas. Algunos riesgos incluyen:

  • Falta de transparencia: muchos modelos son “cajas negras” cuyos criterios exactos no se conocen ni se pueden explicar fácilmente.
  • Discriminación algorítmica: si los datos usados tienen sesgos históricos, el sistema puede perpetuar exclusiones por género, etnia, edad o lugar de residencia.
  • Uso de datos sensibles: el análisis de variables como ubicación, red social o tipo de celular puede generar violaciones de privacidad.
  • Dificultad para apelar: si una persona recibe un puntaje bajo, muchas veces no sabe por qué ni cómo puede corregirlo.
  • Regulación débil: en muchos países no existe legislación específica que supervise el uso de IA en decisiones financieras.

Estos riesgos han generado debates internacionales sobre cómo regular la IA en finanzas para proteger al consumidor y garantizar la equidad.

¿Es la IA más justa que los humanos?

Depende. Si se diseña bien, puede serlo. La IA no tiene prejuicios conscientes, no se cansa, no discrimina por simpatía o apariencia. Pero si se entrena con datos sesgados o se le asignan objetivos puramente financieros (como minimizar el riesgo sin considerar la inclusión), puede amplificar injusticias.

La justicia algorítmica requiere:

  • Datos diversos y balanceados
  • Modelos auditables y explicables
  • Supervisión humana ética
  • Reglas claras sobre qué datos pueden o no usarse

En manos responsables, la IA puede ser una herramienta de inclusión financiera masiva. En manos negligentes, puede convertirse en una barrera invisible para millones de personas.

Conclusión

La inteligencia artificial ha cambiado la forma en que se calcula el riesgo crediticio. Hoy, los algoritmos permiten evaluar a más personas, con mayor precisión, en menos tiempo y con menor costo. Esta transformación ha abierto la puerta al crédito para sectores antes marginados y ha mejorado los sistemas de prevención de impagos y fraudes.

Pero esta revolución no está libre de desafíos. El uso masivo de datos, la falta de transparencia en algunos modelos, y el riesgo de discriminación silenciosa exigen que se implementen con responsabilidad, supervisión y ética.

La clave está en no dejar que la eficiencia reemplace a la equidad. La IA debe ser una herramienta para construir un sistema financiero más justo, no una excusa para perpetuar exclusiones bajo una apariencia de neutralidad matemática.

El crédito del futuro será algorítmico, pero su legitimidad dependerá de cuán humano, transparente y justo sea su diseño. Y eso sigue siendo una decisión humana.

 

 

 

Preguntas frecuentes

¿La IA puede equivocarse al evaluar el riesgo crediticio?

Sí. Aunque es muy precisa, puede cometer errores si los datos están incompletos, desactualizados o mal interpretados. También puede haber sesgos si no se audita correctamente.

¿Qué derechos tengo si un algoritmo me niega un crédito?

Depende del país. En algunos casos puedes pedir una revisión manual, conocer los motivos de la decisión o presentar una apelación.

¿Es legal que usen mis datos personales para calcular mi riesgo?

Sólo si tú das consentimiento o si la ley lo permite. Muchos países están regulando qué datos pueden usarse y cómo deben ser protegidos.

¿Cómo puedo mejorar mi score si se basa en IA?

Manteniendo pagos al día, usando cuentas digitales de forma activa, evitando sobregiros y asegurándote de que tus datos estén actualizados y completos.

Author Hernan González

Hernan González

Desde México, Hernán González ha convertido su pasión por las finanzas en una misión: hacer que el conocimiento económico sea accesible para todos. A través de sus artículos, traduce el lenguaje técnico del trading y la inversión en contenido útil, ameno y aplicable para quienes buscan entender y mejorar su relación con el dinero.